El pasado 14 de febrero, la Comisión Interdisciplinaria Independiente encargada por el Gobierno Nacional, concluyó que en Colombia es posible realizar proyectos pilotos integrales de investigación (“PPII”) con la técnica del fracturamiento hidráulico con perforación horizontal (mejor conocido como “fracking”), siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos.
El pasado 6 de abril, la Comisión publicó el informe completo, el cual contiene las principales conclusiones y recomendaciones que el Gobierno Nacional deberá tener en cuenta al implementar proyectos relacionados con yacimientos no convencionales.
Destaca la Comisión, que todas las actividades relacionadas con los PPII deben tener el carácter de experimental, controlado, transparente, y ser realizados con verificación y seguimiento independiente y participación comunitaria.
Para desarrollar los PPII, la Comisión establece la necesidad de realizar una fase previa y un análisis ex post de la operación. Así, propone tres etapas para llevar a cabo los PPII:
- Etapa uno: con anterioridad al inicio de un PPII, se deben realizar actividades relacionadas con temas sociales, técnicos e institucionales con el fin de construir confianza con las comunidades sobre los términos y condiciones de la ejecución de los PPII. Dentro de esta fase, se incluye con actividades principales el inicio del levantamiento de una línea base social y ambiental;
- Etapa dos: simultáneamente con la ejecución de un PPII, revisar y complementar los aspectos técnicos, sociales e institucionales de la operación; y
- Etapa tres: al culminar la ejecución, evaluar los resultados para definir la prospectividad de proyectos comerciales usando la técnica de fracturamiento hidráulico con perforación horizontal.
Así, una vez realizados los PPII, se deben analizar los resultados con el fin de definir, con base en la aplicación del principio de precaución si el país está listo para avanzar con la producción comercial.
Cabe resaltar, que las recomendaciones por parte de la Comisión no son vinculantes. Sin embargo, son una guía de alto valor que el Gobierno Nacional puede tener en cuenta a la hora de iniciar proyectos piloto en yacimientos en roca generadora que impliquen el uso del fracking.